Especial por Ezequiel Roca Moreno
El viernes último (30/6) alrededor de las 20 horas el Instituto Provincial de Lotería y Casinos (IPLyC) clausuró la sala de juego del Bingo Codere de Morón. Las versiones que circulan son varias, entre ellas por evasión, porque el lunes volvían a inspeccionar, y la que se conoció en las últimas horas de anoche fué por la autorización de una obra que lo solucionarían en la próxima semana con las autoridades de lotería. También se comentó que la clausura había sido dispuesta por el municipio, información que fué desmentida desde el departamento ejecutivo de Morón, incluso agregaron que del operativo no participó ningún funcionario o agente municipal.
Ninguno de los trabajadores de la sala conoce con exactitud cuál era el motivo del cierre, solo manifestaron que debían esperar hasta el martes de la próxima semana (4/7) para saber si regresaban a sus tareas.
Algo no pasa desapercibido, que tipo de obra debe autorizar el IPLyC.? Si es para ampliar salones e instalar más máquinas tragamonedas, o para que el IPLyC les habilite la nueva frente al comedor donde hace varios meses colocaron 40 terminales más. Alrededor de 740 terminales funcionan actualmente, muchas y desde hace tiempo con problemas de funcionamiento, se tildan, no aceptan dinero o tickets que se compran para introducir y poder jugar. Es importante remarcar que hace varios años los bingueros pretendían que la provincia de Buenos Aires les permitiera explotar solo el funcionamiento de las tragamonedas, ya que las jugadas de cartones de la lotería tradicional dijeron que no les era rentable. Durante la pandemia por el Covid-19 la sala de cartones no funcionó, hace algunos meses reabrió solo para los viernes, sábado y domingo en el horario de 14 a 22 horas.
Hay que destacar que desde marzo de 2020 cuando comenzaron los contagios del Covid-19 el guardarropas no funciona, era lógica esta medida preventiva, pero, cuando a partir de agosto de 2021 la sala retomó su ritmo, hasta la fecha no lo habilitaron. Es una falta de respeto y consideración a los clientes y apostadores que concurren a la sala. En el guardarropas, según los horarios se disponía la presencia de hasta 3 empleadas/os, esa cantidad ahora está destinada a prestar servicios en las seis salas donde funcionan las tragamonedas, tres para fumadores y la misma cantidad para no fumadores. Existen muchas más anormalidades que ameritan explicitarse en otras notas.
El 2 de junio reabrió sus puertas la sala de Codere de la ciudad de La Plata, que ante la denuncia de una persona fué clausurada el 19 de mayo pasado por violar la ordenanza 11520 de ese distrito, la misma exige que debe contar con espacios con sillas para personas con obesidad .
Además, semanas pasadas clausuraron las salas de los bingos de Lomas del Mirador, San Justo y Ramos Mejía (Municipio de La Matanza) por el humo de los cigarrillos que circulaba en los salones de apuestas.
Entre las versiones que más se escuchan es que «los funcionarios políticos buscan arreglos, pero que los directivos no piensan acordar».