Por Ricardo Bianchi
El llamado a licitación del dragado de la troncal fluvial del Río Paraná, desde Timbues al sur, de 42 pies, comprueba lo dicho por Albert Einstein, “dos cosas existen en el mundo, la estupidez humana y el universo, de esto último no estoy tan seguro”
Amén del hecho de corrupción monumental que implica este llamado armado por el gobierno, los exportadores y los aplaudidores seriales, como la BCR y otras Instituciones.
A diferencia del Río Misisipi, que cuenta con 29 esclusas y presas a lo largo de su recorrido, que actúan como reguladoras del drenaje de las aguas, el Río Paraná no permite replicar este mecanismo por al ancho del delta que comienza a manifestarse al comienzo del Paraná Medio.
“El Paraná moviliza un caudal colosal de 16 000–20 000 m³/s. Se le clasifica como río aluvial, porque transporta en su caudal sedimentos, tanto por arrastre como suspendidos en el agua, que transforman constantemente su propia morfología, generando bancos e islas.5
En su desembocadura, el Paraná conforma un delta en constante crecimiento, producto de los sedimentos que aportan, principalmente, los ríos Paraguay y Bermejo. Al desembocar en otro río, dicho delta tiene la particularidad de ser totalmente de agua dulce, a diferencia de otros grandes deltas del mundo.6
Junto con sus afluentes, el Paraná forma una enorme cuenca de drenaje que cubre gran parte de la parte central del sur de Sudamérica, incluido esencialmente todo Paraguay, gran parte del sur de Brasil, el norte de Argentina y el sureste de Bolivia”
Por desconocimiento absoluto de las leyes de la Física, por parte de los autores de este esperpento, sobre todo de los enunciados de Galileo y Newton, la gravedad actúa, en los ríos y afluentes, por el diferencial de nivel de las aguas del río con el del mar.
A la altura de San Lorenzo/Timbues, el nivel del agua con respecto al del mar es de cinco metros, es decir 16,4 pies, con lo cual, si se aumenta en diez pies de calado, desde 32 a 42, todavía el drenaje por gravedad sigue operando por el diferencial.
Ejemplo; Supongamos que tenemos una pileta llena de agua, elevada varios centímetros sobre su base. Para vaciarla utilizamos una manguera sobre el fondo de 3 cm de diámetro y la reemplazamos por otra de 4 cm. Qué ocurrirá, obviamente la salida de 4 cm. hará que la pileta se vacié más rápido que la salida de 3 cm. Bueno, esto es lo que pasará con la profundización del canal de 32 a 42 pies, más el ensanche de la troncal previsto en la licitación a 130 metros, por lo tanto, la profundización de 10 pies quedará compensada con el escurrimiento acelerado de las aguas por el solo efecto de gravedad y volveremos a las andadas, luego iremos por 50 pies, etc. con el adicional que los cientos de poblaciones asentadas en ambas riberas quedarán sin poder acceder a las tomas de agua potable para su subsistencia. Un genocidio ecológico sin dudas, sobre una población estimada de diez millones o más de personas.
Esto significa que nos oponemos al aumento de la exportación de la producción y el mejoramiento de la eficiencia. TODO LO CONTRARIO, este tema lo venimos abordando desde varios años sugiriendo el estudio de alternativas que coordinen el respeto al medio ambiente con el aumento de la exportación e importación.
Nos remitimos a https://eldesafiosemanario.blogspot.com/2024/08/el-futuro-de-la-logistica-fluvial.html?m=1 donde aportamos ideas que tienen en cuenta la tendencia del aumento de los portes de los buques de ultramar que hoy cargan hasta 400 mil toneladas en contraposición a las 35/40 que pueden llevar los barcos que llegan a hasta Timbues, con aumento del dragado o sin él.
Acompañamos cálculos que confirman los argumentos dados
Comprobación de las leyes físicas en el dragado del canal
Conclusión para el artículo
La profundización del canal de 32 a 42 pies, combinada con el ensanche a 130 metros, incrementará el caudal total en un 31.28%. Este aumento se debe a la mayor área disponible para el flujo, mientras que la velocidad permanece constante por el diferencial de nivel.
Este cambio puede generar un drenaje más rápido hacia el mar, con posibles impactos en el ecosistema y en la disponibilidad de agua potable para las poblaciones ribereñas. La comparación con el ejemplo de la manguera es adecuada desde un punto de vista físico. Fuente ChatGPT.
El aumento del drenaje en un porcentaje del 31.28, esteriliza la canalización porque deja el Rio con niveles más bajos.
Por otra parte, hay sumarle la Caída abrupta de los niveles mundiales de agua dulce en el mundo, informe de Europa Express https://www.europapress.es/ciencia/cambio-climatico/noticia-caida-abrupta-niveles-mundiales-agua-dulce-20241115184500.html.
Es irracional aumentar el drenaje del Río Paraná por efectos de la profundización y ensanche del canal, cuando debería dejar que la naturaleza obre con la creación de islas modificando la morfología y retardando el escurrimiento. Restar los recursos de agua dulce tan necesarios para el sostenimiento de la vida animal y vegetal y la producción agrícola, es un error o en todo caso, un negocio económico para pocos a los que nada importan los efectos adversos de tal desatino. Además, no puede ser una decisión unilateral, ya que incide en la disponibilidad de agua dulce de toda la cuenca, Brasil, Paraguay, Bolivia, Uruguay. Algo tienen para opinar estos países sobre la cuestión.
Nos parece prudente, que los términos de esta “licitación” se anulen y los responsables, incluidos los miembros del Congreso de la Nación y de las Provincias involucradas, abandonen la anomia y pongan su atención en investigar alternativas, ideas y propuestas que tengan en cuenta el cuidado del medio ambiente en combinación con el aumento de la exportación e importación de productos. Tomando como ejemplo el mega emprendimiento del puerto de Chancay en Perú. El mayor de toda América.
Una sociedad crece, se desarrolla, genera riquezas, esparce los beneficios sobre todos los estamentos sociales, cuando deja de lado la ideología, se apalanca en la Ciencia, la Tecnología, el desarrollo de obras de infraestructuras, privilegia la educación, el cuidado de la salud, imparte justicia ecuánimemente, respeta y cuida de la sustentabilidad ecológica, no oprime a los productores con impuestos desmesurados, estimula el aumento del capital, no toma deudas de manera adictiva, cumple con sus compromisos, apoya la cultura y las artes, genera confianza, mejora el perfil del sistema, escucha la opinión del otro, armoniza los conflictos y pujas de intereses. En suma, elige vivir.